Los referentes a la cultura pop estuvieron presentes en esta versión de la feria, aquí dos pasarelas que no solo se destacaron, también trajeron a colación los exuberantes años 80 en sus historias.
JORGE DUQUE
“No hay nada más hermoso que ser latino”, me decía Jorge Duque cuando empezó a contarme sobre su colección Latina Estéreo. Una historia emotiva y sentida, pues detrás de ella están sus recuerdos adolescentes, ésos que de paso, también son una radiografía, que revelan nuestra historia como país; memoria que no hay que negar, por el contrario, hay que traerla a la luz, y mejor aún, si es a través de un lenguaje creativo, en este caso, la moda.
Sobre la década del ochenta la gente bailaba salsa en las terrazas de Envigado – Antioquia; la felicidad y la opulencia contrastaban con la zozobra y la realidad de un país en conflicto. Los ojos de Jorge se permeaban de un entorno en el que la pregunta por lo femenino emergía, mientras la vida se desenvolvía.
Años después esa información emerge como colección, enriquecida con elementos fuertes en todo sentido: avionetas que sobrevuelan cinturas, amapolas que adornan vestidos y faldas voluminosas, prados verdes que son sacos oversizes o faldas lápiz, grafías y bordados en los que la onda graffitera pop es evidente; una explosión de información que se posa en texturas y materiales diversos como: el tul de seda, las mallas de nylon o el paño inglés; todo en función de expresar lo que para el diseñador es el poder latino. Ese mismo, que al son del Sonido Bestial, se tomó la pasarela para darle paso a mujeres que no solo lucían sexys; cada una de ellas portaba un look que al mismo tiempo era un testimonio de una época coyuntural en Colombia, vista a través del recuerdo de Jorge, quien decide traducir la dureza y realidad que las encierra y volverlas vitalidad a través de una colección en la que se viven los clichés de frente a la historia, sin miedo a asumir lo nuestro, lo que fuimos, lo que somos y por qué no, después de ver este tipo de propuestas, lo que seremos.
LOVE CITIZENS
Así como sus rompe vientos, la pasarela de Love Citizens se abrió paso con ímpetu, gracias a su diseño propositivo y refrescante. Una colección sólida que no solo le aportó dinamismo a la última jornada del Non Stop, además, sacó la cara, con respecto a lo que en beachwear apreciamos este año en las pasarelas de la feria, pues desafortunadamente, las otras marcas de vestidos de baño, presentaron un eterno remake de recursos comerciales que ya tienen agotado este segmento.
Por su parte, Angélica Bagget y Camilo Sánchez, diseñadores de Love Citizens, vienen desarrollando de manera juiciosa y constante un proyecto diferenciado, en el que la preocupación por brindarle a la mujer prendas deseadas bajo lógicas de diseño que no tengan como eje la lentejuela, el canutillo o las técnicas artesanales, es un logro. No porque estos insumos no sean válidos, sino porque ya tienen saturado el mercado de los vestidos de baño.
A los chicos de Love Citizens hay que abonarles que su trabajo en siluetas no solo es actual, sino también, bien ejecutado. El proceso de selección de colores y mezcla de ellos, fue exhaustivo y partió de la influencia de la obra del artista estadounidense, Keith Haring, el más importante de los pintores de graffiti de los años ochenta. De ahí, parte del referente de los estampados, el juego con los arneses de colores y el gozo por la cultura pop que se sintió en toda la colección y puesta en escena.
Da gusto ver los pasos firmes de esta firma, que no teme incluir en su marca piezas como faldas, chaquetas o blusones; prendas que no necesariamente están circunscritas a la playa, pero que de igual forma, componen el universo de la mujer Love Citizens: arriesgada, segura, fuerte y lo repito, actual.
Con ellos el cierre de esa pasarela valió la pena, y seguro los puso en la mira de muchos que no los conocían; como aquellos que en el backstage, antes del desfile, de manera desconfiada les preguntaban quiénes eran y de dónde habían salido… La respuesta es simple señores, ellos son Love Citizens, la mejor pasarela del Non Stop del tercer día y la única marca de beachwear que en Colombiamoda propuso moda.
Créditos:
Fotografías: Jhei Trujillo